Audífono retroaricular cuya carcasa se sitúa detrás de la oreja, más exactamente en la parte posterior del pabellón auditivo, donde se alojan todos los componentes electrónicos necesarios para la mejora de la pérdida auditiva.

El micrófono alojado en la prótesis capta el sonido, lo transforma, lo amplifica y manda la señal amplificada a través del fino tubo que llega hasta el molde alojado en el interior del conducto auditivo externo del paciente.

El molde del paciente es importante realizarlo según las características del audífono y del paciente, teniendo en cuenta la morfología del canal y la pérdida auditiva del usuario.

Los audífonos BTE son estéticamente personalizables ya que cada vez son más pequeños y hay una gama amplia de colores de sus carcasas, aun así, no son tan estéticamente invisibles como el CIC y el IIC, pero poseen otras muchas cualidades superiores frente a los audífonos intracanales.

Son recomendables para niños, ya que con el tiempo, estos van creciendo y solamente con la sustitución del molde (tamaño), el audífono tendrá una vida útil mayor, siempre que la pérdida no aumente en exceso.
Su potencia es muy alta por lo que alcanzan rangos de ganancia muy amplios, pudiendo llegar a solucionar o atenuar hasta pérdidas severas o profundas. • Poseen micrófonos direccionales que al estar en el exterior como en los ITE y ITC mejores el sonido en ambientes de mucho ruido.
La funcionalidad y manipulación del mismo en cuanto a volumen, cambiar la pila… es mucho más sencilla, mencionando que la durabilidad de las pilas es mayor.
Debido a que el circuito de bobina tiene más potencia, podemos Sistemas de Frecuencia modulada (FM).
La realización de moldes abiertos mejoran la comodidad y sensación de oclusión del paciente.
Proporcionan una mayor amplificación que junto a la no oclusión del oído, proporciona un sonido más natural.
Pueden ser recargables mediante baterías sin necesidad de pilas

En conclusión, el audífono BTE tiene mayores prestaciones en relación a la durabilidad, amplificación, potencia y estética.

Una prótesis auditiva recomendable en la mayoría de los casos, siempre teniendo en cuenta los parámetros necesarios para obtener una adaptación apta y cómoda para el usuario. En cualquier caso, será un audioprotesista quien le indique la mejor opción en función de sus necesidades y características auditivas que posea y precise.